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| Dibujo de Antonio Fernández Molina |
Soneto
Traen las noches el vaho entre las patas
con patatas del sueño y el engaño
de todo un trabalenguas en un paño
donde el vivir, se arrastra y anda a gatas.
Mientras la Luna envía luces chatas
bordeando el silencio. Del estaño,
florecen las estrellas todo el año
o florecen del hielo de las platas.
Del mundo dueñas son las largas horas.
Y de la noche tiembla su ricino
como un largo pasillo de piel viva.
Y mientras, gigantescas las esporas,
flotan en lo alto y siguen su camino
hacia donde está la tierra en carne viva.
Del conjunto de poemas: Ala escala, publicado en Valladolid en la colección P.O.E. M.A.S. en 1993. El texto lo tomamos de la versión del volumen Poesías Completas III (Libros del Innombrable. Zaragoza: 2000).
© Herederos de Antonio Fernández Molina
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